Versión para niños: [La historia del niño Jesús] [Los ángeles visitan los pastores] [Los Reyes Magos] [El nacimiento]
Historias de la Biblia para niños
La
historia del niño Jesús
Contribución de Leanne Guenther y Sharla Guenther
Hace mucho tiempo, en el pueblo de Nazaret, vivía una joven
mujer llamada María. María hacía sus oficios, era amable con los demás y
amaba mucho a Dios. Estaba comprometida para casarse con José, quien era
un carpintero.
Un día, mientras María estaba en su casa limpiando su
habitación, un ángel se le apareció de repente. Antes de que María pudiera
decir algo, el ángel le dijo que era la elegida por Dios, y que Dios estaba con
ella.
María estaba sorprendida. Estaba tratando de no asustarse,
pero nunca antes había visto un ángel. Después de todo, María era una dama
normal como tú o como yo. ¿Por qué la visitaba el ángel? ¿Qué quería
el ángel?
El ángel rápidamente trató de tranquilizar a María, "¡No
temas!" dijo ángel. "Dios te ha elegido. Tendrás un niño y le pondrás por
nombre Jesús."
María estaba confundida, aun no se había casado con José,
así que ¿cómo podría tener un bebé? El ángel pensó que esto preocuparía a
María y dijo, "El Espíritu Santo hará un milagro, y por esto tu bebé será
llamado el Hijo de Dios".
Para sorpresa de María el ángel traía otras
buenas noticias; "inclusive tu prima Elizabeth tendrá un hijo a su edad madura.
Muchos pensaron que no podía tener hijos, pero ya está embarazada. Nada es
imposible para Dios".
María no podía creer lo que escuchaba, no sabía qué
decir. Se dio cuenta de que estaba temblando y cayó de rodillas.
Cuando finalmente pudo hablar dijo, "Soy la sirviente del Señor, y espero que
todo lo que has dicho se haga realidad".
Entonces el ángel desapareció y
María quedó sola.
Poco tiempo después, José se enteró de que María iba a
tener un bebé. José estaba confundido y molesto por esta causa. Pero
un ángel vino a él en un sueño y dijo, "José, no temas tomar a María como tu
esposa. El niño que María tendrá es el hijo de Dios, y le darás por nombre
Jesús".
Cuando José se despertó recordó lo que había dicho el ángel.
Sabía que todo estaba bien, y ya no estaba molesto.
En aquellos días el
gobierno decidió que contaría a todos los que vivían en esa área del mundo.
Así que José debía llevar a María a Belén, su pueblo, para registrarse.
Les tomó mucho tiempo a María y a José para llegar a Belén. No tenían
carros en esa época, así que probablemente les tomó mucho más tiempo llegar
allí. Este viaje fue agotador para María porque pronto tendría un bebé.
Cuando llegaron al pueblo, todos los hoteles estaban llenos y no había lugar
donde ellos se pudieran quedar. Finalmente, alguien se compadeció y les
ofreció un lugar para quedarse.
La Biblia no dice con seguridad donde se
quedaron, pero la mayoría de la gente piensa que se quedaron en un pequeño
establo donde se mantenían animales. En todo caso, ¿no parece extraño que
Jesús, el Dios de los Judíos no hubiera nacido en un palacio lujoso o aun en un
hospital?
María
y José estaban agradecidos porque al menos tenían un lugar para
descansar. Era tibio y había mucha paja donde recostarse.
Esa noche algo emocionante y maravilloso sucedió. ¡María y José
tuvieron un bebé! Pero no era solo un bebé, ¡era el niño Jesús! El
creador de todo el mundo, el Rey de Reyes, quien salvaría al mundo.
El pequeño bebé se quedó dormido en los brazos de María y ella lo
envolvió en telas y lo recostó en un pesebre sobre paja limpia.
María y José pronto se durmieron, estaban muy felices de tener este bebé
especial en su familia.