Jack corrió tan rápido como pudo y el gigante, al darse cuenta de que lo habían engañado, se apuró a seguirlo – alejándose del castillo y bajando por el ancho y largo camino. Cuando llegó
a la planta de fríjol, el gigante estaba solo a veinte yardas de distancia cuando de repente vio que Jack desapareció – confundido, el gigante echó un vistazo a través de las nubes y vio a
Jack bajando para salvar su vida. El gigante pisoteó y rugió furioso.
Fi-fa-fo-fum,
Huelo la sangre de un niño inglés,
Este vivo o este muerto
Moleré sus huesos para hacer mi pan.
El gigante se descolgó bajando por la planta de frijol, la cual tembló con su peso. Jack se escurrió, se deslizó y bajó por la planta de frijol tan rápido como pudo, y el gigante bajó tras él.